domingo, 16 de noviembre de 2014

País de héroes.... Venezuela...

Autor: José Antonio Puglisi


 En un país donde, anualmente, 19.000 personas son asesinadas y otras 1.200 son secuestradas, es necesario tomar ciertas precauciones. Conductas preventivas que, al fin y al cabo, terminan convirtiéndose en procedimientos rutinarios que desgastan el nivel de vida de todos los venezolanos. A continuación, les ofrecemos un breve listado de los 10 consejos que podrían ayudarle a permanecer con vida en Venezuela:

1. Desconfíe: Las personas que se aproximan a usted para preguntar la hora, pedir unas monedas o comentar sobre el clima no suelen tener esa única intención. A veces, la más inocente de las conversaciones puede terminar en un atraco frente a las miradas indiferentes de los demás transeúntes. Ninguno expondrá su vida por usted.
2. Cuidado con el héroe: A diferencia de los dibujos animados, los policías no son las almas voluntarias que se arriesgarán por su seguridad. En la mayoría de los casos, los oficiales son conscientes de antemano de los actos ilícitos que ocurren en la zona que patrullan y los permiten a cambio de pequeñas comisiones. En otras ocasiones, como se ha demostrado con hechos, son los mismos policías los que cometen los actos delictivos (secuestros y asesinatos, usualmente).
3. Una vida modesta: Ostentar un vehículo costoso, joyas o, simplemente, un smartphone son una invitación a los criminales. Los delincuentes observan detenidamente a sus víctimas y el potencial de su poder adquisitivo. Transitar por las calles de Caracas en un carro en buen estado, por ejemplo, es exponerse a un secuestro exprés; mientras que una persona que camine enviando mensajes “pin” será despojada de su móvil y demás pertenencias. A veces, la modestia le puede salvar la vida.
4. Visión 360 grados: Una mirada para atrás nunca viene mal. Este simple habito, que todos los venezolanos han adoptado inconscientemente, ayuda a comprobar que nadie te está siguiendo o que tienes un corto espacio de seguridad a tu alrededor. En algunos momentos, donde esta técnica se torna más complicada (esperando a un amigo, en unas escaleras mecánicas o un ascensor), lo mejor es pegar la espalda a una pared.
5. Permanecer enjaulado: Para prevenir situaciones desagradables en los hogares, se recomienda que las ventanas de las viviendas tengan rejas, así como métodos de seguridad en todas las puertas (casa, garaje, zonas comunes). En algunas casas se ha optado por el uso de cercos eléctricos para impedir la entrada de los delincuentes. Vivirás como un preso, pero te ayudará a permanecer a salvo.
6. Bebidas personalizadas: Disfrutar de una fiesta en un local nocturno puede terminar en una desgracia. En los últimos años se han utilizado diversas drogas que alteran el organismo, como la “burundanga”, para que las víctimas accedan a las peticiones de los delincuentes sin prestar ninguna oposición. Las bebidas descuidadas son el medio habitual para colocar estas sustancias, por lo que se recomienda tenerlas siempre bajo vigilancia y no compartirlas con personas en las que uno no confíe. Así podrá evitar que, impulsado por los efectos de la droga, acceda voluntariamente a sacar todo su dinero de cajeros electrónicos, lleves ladrones a tu casa o consientas violaciones.
7. Toque de queda: Si los actos delictivos quedan impunes a plena luz del día, en la noche se multiplican los riesgos. Para evitar inconvenientes, lo aconsejable es volver a las viviendas antes de las 10 de la noche; sí, más temprano que la Cenicienta. Sin embargo, resulta imposible adaptarse a ese horario si se acude a una fiesta; para esos casos, la mejor opción es realizar los encuentros en casa de algún amigo y permanecer ahí hasta el amanecer.
8. Insensibilízate un poco: Un auto accidentado en una autopista, una anciana en dificultades, una doncella en aprietos, niños llorando porque no encuentran a sus padres, todos ellos son algunos de los trucos para engatusar a las personas de corazón noble. Estas trampas cambian según la creatividad de los delincuentes, por lo que, cada vez que quiera ayudar a alguien, asegúrese que no se esté poniendo en peligro a sí mismo o a sus seres queridos.
9. El precio de la astucia: Algunos ciudadanos han diseñado sus propios métodos de seguridad: tener dos móviles para dar el más antiguo a los ladrones, no tener dinero en la cartera, ocultar las prendas de valor en zonas íntimas. Aunque en algunas ocasiones ha funcionado, ya son técnicas conocidas por los delincuentes, quienes al verse involucrados en alguna de ellas suelen responder con violencia física. Es mejor ser menos listo y permanecer con vida, que ser astuto y entregar tus pertenencias como un cadáver.
10. Pensar con prudencia: La sensatez puede salvarte en más de una ocasión. Por tonto que parezca, evitar calles solitarias y poco alumbradas, estar acompañado la mayor parte del tiempo, no hablar sobre tu poder adquisitivo y evitar enfrentarte con los atracadores (casi siempre son más en número y están armados) te pueden prevenir de vivir una situación desagradable.

Estos diez consejos son una pequeña muestra de cómo los venezolanos han tenido que adaptarse a vivir entre la zozobra y la incertidumbre. La inseguridad se esparce impune por todos los estados del país, mientras los representantes del Gobierno, rodeados de su guardia pretoriana, hablan de campañas mediáticas que buscan confundir al pueblo. Es fácil sentirse seguro cuando se tiene a 10 hombres armados velando por tu vida. Una ventaja que no todos los ciudadanos tenemos. Sin embargo, cuando se tengan dudas sobre si la delincuencia es real o un mito de Globovisión, pregúntese: ¿cuántas personas que conozco han sido robadas, secuestradas o asesinadas en el último año? La verdad se estrellará contra su rostro, mientras sigue volteándose para verificar que nadie le persigue en una moto o un vehículo de cristales tintados.